En ART Seguros estimamos que este es un tema interesante para el ciudadano de a pie de manera que quede informado sobre las diferentes clases de invalidez existentes en la actualidad.
De todos es sabido que cualquier enfermedad o accidente suele originar una incapacidad para el trabajo que comporta la baja correspondiente.
¿Y qué ocurre si esa baja dura más de 18 meses o hemos sufrido algún trastorno o mutilación que nos impida desarrollar nuestro trabajo con normalidad? En ese caso entramos en la escala de invalidez cuyo grado es determinado por un tribunal médico.
Existen diferentes clases de invalidez. Algunos tipos permiten seguir trabajando. Ese tipo es considerado como INVALIDEZ PARCIAL.
La INVALIDEZ PROFESIONAL, como su nombre indica y también conocida por INVALIDEZ TOTAL, es aquella que nos impide ejercer totalmente nuestra profesión. Ejemplo: el profesor que sufre alguna disfunción en la laringe.
Ahora bien, si a causa de lo ocurrido el sujeto no puede ejercer cualquier oficio o profesión estaremos ante una INVALIDEZ ABSOLUTA Y PERMANENTE.
Si, además de estar incapacitado por completo para el trabajo, el sujeto necesita la asistencia de otra persona para la vida diaria, estaremos ante una GRAN INVALIDEZ.
Como cubrir estas contingencias
Las opciones son diferentes según las distintas clases de invalidez.
- En caso de BAJA TEMPORAL lo más idóneo es concertar una póliza de SEGURO DE SUBSIDIO DIARIO. Es idóneo para los autónomos así como el seguro de accidentes que es el único que cubre cualquier tipo de INCAPACIDAD PARCIAL.
- SEGURO DE ACCIDENTES: Existen varias modalidades que merecen un estudio pormenorizado según las indemnizaciones a percibir. Recomendamos incluir la cobertura de MUERTE POR INFARTO que muchas compañías la consideran muerte accidental.
- SEGUROS DE VIDA: Este tipo de seguros, como los de accidentes, cubren tanto la incapacidad o invalidez total como la absoluta. La gran diferencia entre ambos estriba en que los de vida cubren también aquellas continencias originadas por enfermedad.